Descubriendo la selva en Puerto Maldonado
Seguimos nuestro viaje haciendo una incursión en la selva peruana. Estábamos emocionados por ser nuestra primera experiencia en la selva ! Concretamente estuvimos en Puerto Maldonado, población ribereña del río Madre de Dios, afluente del Amazonas.
Llegamos desde Cusco a las 8 de la mañana cogiendo un bus nocturno de 10 horas. Nos recibió la lluvia que nos acompañó durante 2 horas más pero que no volvió en ningún momento durante los días que estuvimos, que suerte!
Por cierto, estuve todo el trayecto sufriendo por como conducía el conductor. Iba a lo Colin McRae y encima lloviendo. Al llegar nos enteramos que cuando llueve, el trayecto Cusco – Puerto Maldonado, muchas veces queda cortado por los derrumbamientos en la carretera, de ahí las prisas del conductor. Por lo que si decidís hacer este trayecto tenedlo en cuenta. Nosotros de repetir cogeríamos un vuelo interno. Si lo compras con tiempo sale económico con la compañía Star Perú.
En los últimos años la zona ha evolucionado bastante a nivel de servicios turísticos. Actualmente tanto si uno se aloja en la población de Puerto Maldonado, como si decide escoger dormir en alguno de los varios establecimientos que hay dentro de la selva, tiene varias opciones donde escoger. Nosotros teníamos claro que queríamos estar los más alejados de la población como fuera posible, cosa que recomendamos, pues tienes más posibilidades de ver animales y disfrutar del entorno más virgen posible.
Encontramos Amazon Planet, un alojamiento fantástico, que además de estar a 90 minutos en canoa de la población de Puerto Maldonado Tienen un convenio de colaboración con el Centro de Recuperación Taricaya donde se lucha por la conservación animal de la zona con distintos proyectos de auxilio, recuperación, y reinserción de animales en situación de riesgo. Motivo que nos hizo decidir finalmente por este alojamiento. A destacar el trato del personal y la comida, hecha a base de productos cosechados por ellos mismos y recolectados directamente de la selva.
Sea cual sea el alojamiento escogido, lo habitual en la zona es que ofrezcan paquetes cerrados de alojamiento y actividades. Nosotros nos decidimos por la opción de 4 días y 3 noches.
Caminamos de día y de noche por la selva, conociendo la flora y fauna. Visitamos el centro de Recuperación Taricaya. Hicimos una caminata por los puentes colgantes y torres de vigía que hay por la zona.
Especialmente recomendable es hacer una excursión al Lago Sandoval, que fue lo más bonito de los días que pasamos allí.
Una experiencia inolvidable aprendiendo un montón de cosas gracias a nuestro guía Iber que nos acompañó los cuatro días. Como éramos los únicos alojados en el lodge que hablábamos español, tuvimos la suerte que nos tocó un guía para nosotros.
Estos cuatro días en la selva fueron un fantástico punto de contraste durante nuestro viaje.
Si cerramos los ojos aún podemos relajarnos y escuchar el sonido de la selva…