El fascinante territorio Inca (Cusco y Machu Picchu)
Llegamos a Cusco después de 10 horas de viaje en bus desde Arequipa. La ciudad nos encantó. Cusco esta rodeada de pequeñas montañas a 3400 metros de altitud.
Si llegas directamente des de Lima, conviene tomárselo con calma el primer día por el cambio de altitud. Nosotros llegábamos de Arequipa (2335 metros) y lo notamos. Estuvimos 4 noches en Cusco, aparte de la que pasamos en Aguas Calientes para visitar Machu Picchu.
La ciudad es perfecta para los que quieren relajarse paseando por sus calles o visitando interesantes museos para conocer la historia y cultura de Perú. También para quienes les guste hacer excursiones y actividades al aire libre.
También cuenta con una excelente oferta gastronómica para todos los gustos y bolsillos.
Sin duda recomendamos comer en los puestos de comida del Mercado de San Pedro. Para nosotros comer en los mercados es la mejor forma de conocer la comida de cualquier lugar. No son sitios turísticos, es donde come la gente de Cusco y es por eso que vale la pena probar.
Llegada la noche se puede disfrutar de su vida nocturna y tomar algún que otro Pisco Sour, el combinado típico de Perú.
Nos alojamos en Yawarmaki Hostel. Un hostal sencillo, limpio y muy bien ubicado. Aunque la diferencia la marcó sin duda su dueña Raquel, con su atención, trato y estupendos desayunos que nos preparó.
En la Plaza de Armas de Cusco hay un montón de compañías donde contratar las diferentes excursiones. Fuimos al Machu Picchu, haciendo noche en Aguas Calientes. Se puede llegar en tren des de Cusco o en bus colectivo hasta la Central eléctrica y desde allí andando por la vía del tren hasta Aguas Calientes.
Hicimos esta última opción, sin duda muy recomendable.
Aunque el trayecto en bus colectivo es largo, vale la pena por los paisajes que se ven. Aparte que resulta mucho más económico que el tren.
¿Qué decir del Machu Picchu? Es emocionante encontrarse en ese sitio que tantas veces hemos visto en videos o en fotos. Las ruinas, el enclave, conocer la historia que hay detrás. Perderse por sus rincones. Inolvidable.
También hicimos la excursión a la Montaña de Colores. Salimos muy temprano de Cusco y a media tarde ya estábamos de vuelta. No pudimos ver los 7 colores que dicen que tiene la montaña porqué empezó a granizar. Quedó todo blanco y a partir de los 5000 metros había mucho hielo. No llevábamos crampones y era peligroso. Pero aun así mereció la pena porqué el entorno es espectacular. Además fue un buen entreno para las excursiones más exigentes que queríamos hacer en Bolivia.
Disfrutamos mucho los días que pasamos en Cusco, sin duda repetiríamos!!